Las sábanas blancas con olor a limpio, la textura finísima del hilo, la almohada viscoelástica mullida y perfecta, la calidez y el peso pluma de un edredón nórdico, y tu huésped rodeado de cojines cogiendo la posición más cómoda dentro de la cama para disponerse a disfrutar de una reparadora noche de descanso.
Como ya sabrás, cada vez son más las personas enfrascadas en rutinas interminables o viajes estresantes que acuden a tu negocio para sencillamente darse el lujo de dormir bien después de una jornada intensa de viaje o trabajo.